Viña Pomal Terruño Centenario Reserva es la identidad de Bodegas Bilbaínas. Uno de los tintos reserva más emblemáticos y con mayor reconocimiento. 100 años de historia avalan un vino que combina a la perfección, tradición y renovación.
Picota intenso, con ribete rubí de marcada intensidad.
Violetas y frutos rojos que se matizan con especias dulces (vainilla), regaliz y torrefactos.
Sutil, elegante y persistente.
Fundada en 1901 en el mítico Barrio de la Estación de Haro, Bodegas Bilbaínas es la firma embotelladora más antigua de La Rioja. Cuenta con la mayor superficie de calados subterráneos del territorio y con la mayor extensión de viñedo del municipio: 250 hectáreas de una calidad privilegiada que nutren de uva propia a la bodega, lo que asegura un procesamiento rápido sin pérdida de calidad. Viña Pomal es su marca buque insignia y encarna la mejor tradición vitivinícola de la Rioja Alta; son vinos excepcionales que se han mantenido fieles al estilo clásico del auténtico Rioja desde sus orígenes.
Tras su paso por barrica, este vino tinto permanece dos años en botella antes de salir al mercado.
Viña Pomal Terruño Centenario Reserva se elabora a partir de una selección de parcelas de nuestro viñedo D.O.Ca. Rioja. Fermentación a 28 ºC y una maceración total de 3 semanas. Se cría durante 18 meses en barricas de roble americano, un 20% nuevas. En este tiempo, las trasiegas nos permiten ir limpiando por decantación natural el vino. Tras su paso por barrica, este vino tinto permanece dos años en botella antes de salir al mercado.
La finca Viña Pomal está formada por 90 hectáreas de viñedo D.O.Ca. Rioja.
La finca Viña Pomal está formada por 90 hectáreas de viñedo D.O.Ca. Rioja. Enclavados en el término municipal de Haro y a menos de 2 kilómetros de la bodega, se sitúan en uno de las zonas más bellas de la ciudad; a través de ellas podemos disfrutar del paso del río Ebro a través de las conchas de Haro. Se combinan en nuestra finca distintos ecosistemas en función de la variabilidad del suelo y de la exposición solar, lo que se traduce en un trabajo exhaustivo de selección de zonas homogéneas. La viticultura que se aplica surge de una mezcla entre la tradicional riojana y la de precisión, dando como resultado a una viticultura que apuesta por la innovación para proteger la naturaleza, siempre bajo los parámetros de obtener máxima calidad.