El más genuino de la colección. Un espumoso 100% Pansa Blanca que busca mostrar la expresión más honesta de los mejores viñedos de la DO Alella.
Presenta un color amarillo intenso como resultado de la fermentación en barrica.
Nariz muy sugerente, destacando los aromas de fruta blanca y de hueso con notas de flores secas.
En boca es amplio, estructurado y largo.
La bodega toma el nombre de la masía histórica (siglo XVIII) que se alza entre sus viñedos en Santa María de Martorelles (Vallès Oriental). El denominador común de los vinos es la variedad autóctona de la zona (Pansa blanca) y la singularidad de los viñedos, todos ellos históricos y, en algunos casos, plantados antes de la filoxera. Otro denominador común es el cuidado de la vid para que el vino sea la expresión más honesta del terruño donde nace.
Prensado de la uva y fermentación a temperatura controlada de 16ºC en barricas de roble francés y una pequeña parte en depósitos de acero inoxidable.
Una primavera húmeda y lluviosa con temperaturas suaves provocó una elevada presión de enfermedades fúngicas. El verano fue seco pero no excesivamente caluroso. En general, podemos hablar de una añada compleja, en la que cada parcela tuvo sus particularidades, con una producción superior a la de años anteriores, y vinos de muy buena calidad.
Los viñedos de Sant Fost de Campsentelles se caracterizan por un suelo de textura arenosa muy fina llamado "sauló" procedente de la descomposición del granito.
Es un suelo pobre en nutrientes, con baja retención de agua y PH moderado. Los viñedos están situados en las laderas de la Cordillera de la Marina, con una orografía suave. Los viñedos tienen una edad de 20 años. La densidad de plantación es de 3.500 cepas/ha. Las viñas están conducidas en espaldera con poda corta.