La recuperación de un clásico de Cellers Scala Dei. Massipa es la re-edición de uno de los vinos de la bodega que anteriormente se conocía como “Blanc de Scala Dei”. Con este vino Crianza pretendemos enseñar la cara más fresca de la Garnacha Blanca del Priorat. Al catar el vino de la añada 1991 y comprobar su conservación transcurrido todo este tiempo, decidimos retomar su vinificación a partir del mismo viñedo.
Scala Dei es la bodega más antigua del Priorat, cuyo origen reside en las tierras que rodeaban el monasterio de Scala Dei, donde los monjes Cartujanos elaboraban vino desde el año 1163. Hoy se conserva el mismo espíritu del trabajo artesanal hecho a mano adaptado a las nuevas técnicas. Los vinos de Scala Dei son una auténtica expresión del terroir, elaborados a partir de unas privilegiadas viñas que destacan por ser las más antiguas de la zona, situadas entre los 400 y 800 metros de altura, y con unos suelos singulares en diferentes orientaciones.
Se vendimian a la vez la Garnacha y el Chenin.
Se vendimian a la vez la Garnacha y el Chenin: la Garnacha está al punto de maduración que consideramos oportuno, y el Chenin nos ayuda a mantener la acidez. Ya en bodega, se prensan juntos los dos varietales, se desfanga el mosto y se trasvasa a un depósito de hormigón donde fermentará a temperatura controlada de 16-18 ºC con levaduras autóctonas. Una vez finalizada la fermentación, se trasvasa para quitar las lías gruesas y restan solo las finas. Durante los primeros dos meses de crianza se realiza un battonage por semana y permanece en el depósito; a partir de los dos meses inicia una crianza estática con las lías en el fondo del foudre.
Se trata de un vino de un solo viñedo, La Massipa, situada justo al lado de la viña de Masdeu, con orientación este, a 650 metros de altura y de suelo arcilloso rojo con incrustaciones de yeso.
Se trata de un vino de un solo viñedo, La Massipa, situada justo al lado de la viña de Masdeu, con orientación este, a 650 metros de altura y de suelo arcilloso rojo con incrustaciones de yeso. El viñedo tiene 45 años y es el único con uvas blancas de Cellers de Scala Dei. Un camino divide la viña por la mitad: a un lado se halla la Garnacha Blanca y al otro el Chenin, plantado por el Sr. Peyra a finales de los 80 con la llegada de varietales franceses al Priorat.