Raimat es la bodega más antigua de la D.O. Costers del Segre, está ubicada en Lleida y se encuentra inmersa en un paisaje caracterizado por la niebla que aparece casi todos los días al amanecer y al atardecer. Raimat Boira Garnacha es un vino que le debe su nombre a este fenómeno de nubes densas y blancas que arropa los viñedos a diario, esos mismos que luego darán lugar a este vino ecológico tan goloso y con aromas a frutas negras. Hazte con él y sumérgete en esta agradable niebla de aromas frutales en tu copa.
Color rojo picota con reflejos morados que denotan juventud.
Destaca una entrada afrutada y anisada, predominando la fruta negra madura (moras y arándanos) entremezclada con violetas y un fondo mentolado con recuerdos de hojas de laurel.
Entrada amable y golosa de taninos muy suaves en su paso de boca. Reaparecen de manera intensa las sensaciones de frutas negras con notas de cacao muy suaves y balsámicos. Final de boca de regaliz y toques anisados.
La historia de Raimat se remonta a 1914, cuando Manuel Raventós i Domènech adquirió unas tierras áridas e infértiles en un entorno único, para convertirlas en lo que hoy en día son 2.245 hectáreas de viñedos 100% ecológicos certificados. Raimat es la expresión de los vinos de Lleida, una tierra reconocida por la calidad de su fruta, donde la continentalidad de su clima hace que la uva de esta finca dé vinos intensos y gustosos. La bodega ha sido pionera en tecnologías de cultivo y enológicas, con una apuesta clara por la viticultura sostenible y el respeto por la tierra y el entorno.
Las uvas de la D.O. Catalunya entran a bodega rápidamente después de haberse vendimiado y siguen una maceración en frío.
Las uvas de la D.O. Catalunya entran a bodega rápidamente después de haberse vendimiado y siguen una maceración en frío alrededor de los 15 ºC para poder extraer la máxima fruta. La Garnacha se fermenta a una temperatura controlada de 25-28 ºC en tanques de acero inoxidable para favorecer la carga frutal, frescura y elegancia de esta variedad; una pequeña parte se elabora a mayor temperatura para aportar un buen tanino, color y aromas a la mezcla final. Cuando la fermentación ha terminado se trasiega a otros depósitos para hacer la fermentación maloláctica. Todo el proceso de elaboración de este vino sigue los principios de la producción ecológica.
Para variedades tintas se pudo esperar hasta la óptima madurez fenólica e incluso algo sobremadurados.
Para variedades tintas se pudo esperar hasta la óptima madurez fenólica e incluso algo sobremadurados, lo que contribuyó a conseguir vinos con más intensidad de sabores y taninos más suaves. Esta añada ha dado vinos tintos distintos, con personalidad y elegancia.