¿Cuándo decantar un vino?
La decisión de decantar un vino no es arbitraria, ya que depende de la edad y del tipo de vino. Los vinos jóvenes y robustos, como ciertos vinos tintos jóvenes, pueden beneficiarse de una breve decantación para abrir sus aromas y suavizar taninos.
Por otro lado, los más añejos, especialmente aquellos con sedimentos, reclaman una decantación más prolongada para separar los citados sedimentos y permitir que el líquido respire. En esencia, podríamos decir que decantar es adecuado cuando se busca mejorar la presentación y expresión del vino.
¿Cómo se debe decantar un vino?
Decantar un vino es un acto que requiere precisión y cuidado. Este es el proceso de decantación del vino para obtener resultados satisfactorios:
1. Posicionamiento vertical. Coloca la botella en posición vertical durante, al menos, un día antes de abrirla. Esto facilitará que los sedimentos se depositen en el fondo de la botella.
2. Corte de la cápsula. Córtala alrededor del cuello de la botella para dar lugar a un vertido suave y evitar que los sedimentos caigan en la copa.
3. Decantador limpio. Utiliza un decantador limpio y seco para prevenir la contaminación del vino.
4. Vertido cuidadoso y observación continua. Vierte el vino lentamente en el decantador, deteniéndote cuando comiencen a aparecer los sedimentos en el cuello de la botella. Este proceso no solo separa estos sedimentos, sino que posibilita que el vino entre en contacto con el aire, mejorando su perfil aromático y suavizando su estructura.
¿Cuánto tiempo se debe decantar un vino?
El tiempo de decantación varía según el vino. En términos generales, los vinos jóvenes pueden requerir 30 minutos, mientras que los más antiguos pueden necesitar varias horas para alcanzar su plenitud. Sin embargo, no hay reglas estrictas, pues la clave reside en la paciencia y la observación. Es importante saber cómo catar un vino para poder apreciar estos matices.
Probar el vino durante el proceso de decantación permite ajustar el tiempo según el desarrollo de sus características deseadas. Para ello, deberás tomar pequeñas muestras y evaluar su aroma y sabor.
¿Cómo se puede decantar un vino?
Existen diferentes variantes que pasamos a detallarte:
- Decantación por gravedad. Es el proceso que consiste en verter el vino desde su botella original a través del cuello hacia el decantador. Su propósito es propiciar que la gravedad realice el trabajo. Esta técnica es especialmente útil para vinos más antiguos con sedimentos.
- Doble decantación. Al regresar el vino al decantador original, después de eliminar los sedimentos, se puede llevar a cabo una segunda oxigenación. Esto hace que mejoren aún más sus características. Suele utilizarse en vinos añejos como en vinos tintos gran reserva.
- Decantación a la vista. Decantar frente a los comensales puede agregar un toque atractivo y teatral a la experiencia. Así, permitirás que sean partícipes del proceso y se anticipen al disfrute inminente.